Santa Notburga fue una doncella tirolesa que vivió en el siglo XIII (c. 1265-1313) y es especialmente conocida por su piedad, compasión y compromiso con los pobres. Notburga insistía en dar la comida sobrante a los pobres, cosa que a veces le prohibían los señores. Cuenta la leyenda que dejaba de trabajar cuando las campanas de la iglesia llamaban a la oración y que su guadaña permanecía suspendida en el aire.
Fue canonizada por el Papa Pío IX en 1862. Su fiesta conmemorativa es el 13 de septiembre. Se la considera patrona de los criados y campesinos. Su tumba se encuentra en la iglesia de peregrinación de Eben am Achensee.
